Te Encontré

Mirando al horizonte,

Perdida y confusa entre tanta gente,

Acongojada y ansiosa de no poder hacer algo con mi vida,

Comprendí, que algo debí salvarme de todo eso,

Que alguien o algo, me debía hacer respirar, gritar y llorar,

Que alguien debería, entre todas esas personas inertes, hablarme,

Y sólo con el sonido de sus palabras dejarme ensimismada, atónita…

Que tan sólo con una mirada de aquel personaje yo quedara estupefacta,

Con unas ganas tremendas de besarlo,

Que en el momento en que el rozara sutilmente su cuerpo con el mío,

Yo ya no existiera, y ardiera de amor por él,

Que sólo con que una de sus lágrimas rodara por su perfecto semblante,

Llorara yo también,

Compartiendo hasta el dolor más simple,

Que con un abrazo nos compenetráramos de tal manera Que no nos separáramos nunca..

Que un beso, el más tierno, el más simple, nos emocionara,

Y riéramos de todo y de todos…

Que al decir “te amo”, se me retorciera el estómago, me mordiera el labio y me rascara la nariz,

Por que todo eso me haría feliz…

Entonces…

Ahora podré respirar, gritar y también llorar,

Ahora estaré ensimismada y atónita, y por cierto, estupefacta,

Además, es que ya no existo, y vieras como ardo de amor por él,

Y cómo lloro, y cómo me emociono, y cómo me muerdo el labio, y cómo me rasco la nariz, y obviamente cómo soy de feliz

Andrea León Clott